Ainhoa Andrés Batres
| Sobre mí |
Todo comienza con una inmensa emoción. Siento una necesidad imperiosa de traducir esa emoción en pintura. A veces pienso que puede que sea la propia pintura la que desea ser emoción.
Cuando era pequeña observaba las goteras que había en los techos…y recuerdo que me producían mucha tristeza, sentía desarraigo, miedo a la pérdida del hogar… era una emoción fuerte.
Siempre he sentido que cuando aparece una emoción fuerte, aparece también la oportunidad de convertirla en otra cosa que sea más sana o productiva… transformarla en algo bello.
Y eso fue lo que hice, transformar esa tristeza en pintura…pintaba goteras, me especialicé en reproducir el proceso creativo de las goteras y precisamente en eso hice mi proyecto de pintura en la carrera de Bellas Artes.
Y para que me acompañéis un poco más y podáis conocerme, os contaré un poco más acerca de mi proceso creativo….
Mi obra refleja las cosas que yo observo y contemplo en mis días; mundos sutiles y mundos inmensos dentro de la naturaleza, como los movimientos del agua, las formas de la montaña, las formas transitorias e impermanentes de las nubes.
Tengo necesidad de conectar con la tierra por medio de las manchas, los vestidos de pintura, las sedimentaciones… para ello coloco el lienzo en horizontal en el suelo.
Después siento muchas ganas de bailar y busco ritmos y gestos dentro de las manchas, hago a las manchas danzar dentro del espacio del soporte.
A continuación me apetece deleitarme en las manchas y los gestos, llenar de detalles y de contemplación el lienzo…así como la naturaleza y la vida está colmada de detalles pequeñísimos si te detienes a contemplarla.
Y para terminar mi obra busco unificar las formas para crear un conjunto que tenga armonía, busco generar belleza y crear junto con los espacios en blanco.
El espacio vacío en el lienzo es para mí una forma más, que aporta valor, da aire y permite respirar dentro de la observación de la obra.
Pintando busco traducir en un lenguaje tangible las emociones intensas, el dolor, la felicidad de la danza, la libertad de la música, la grandeza de la paciencia, la importancia de la soledad, el vacío verdadero del silencio.
Entiendo el momento de creación como un momento de comunicación sublime y de sana libertad conmigo y empatía y conexión con el mundo.
Quiero compartir mi entusiasmo y la belleza que existe en el proceso creativo con los demás.